jueves, 25 de diciembre de 2014
Sylvia Cirilho
Japanese
Con mi puta costumbre de río
de pasar por tus riberas sin mojarme;
sabía que primero vendría averme
tu cabeza,
tu cuello de canson marfil
y más luego tu lomo de risco.
De verde gabardina mi boca
en la noche que quise preparara
tu plato de arroces y naranjas
no te hablé de mi nombre
sólo me dejé prender fuego como escarabajo
con un as de oro entre los ojos
lujosa como escarabajo,
doblé tu risa
en rumor de vidrio.
Pues que ahora
espero a coro con un violín de única cuerda
haciéndome japonesa
para hacer que tu voz en traje de turista
se baste con delicias que te pertenecen.
-o0o-
no soy inmune, nena (Morrison)
importan tus ojos
la revolución de las velas
las jaurías y el exceso
un reloj de semillas tostadas
abre la caja de la noche
y bailamos
el remiendo de la diástole
en el beso de la mariposa
al almendro
(una quisiera ponérsete cerca
tocar
al fin
tu extremo de ángel)
trama
Bordo una sirena
mientras mi hermana da cuerda a sus ojos
para que se den vuelta hacia lo que quema
el aire se condensa en este Junio
de vidrio empañado
circular como espejo
casi como el Sol.
de Pulpa a la hora de los dátiles- textos intrusos 2014
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"Con mi puta costumbre de río
ResponderEliminarde pasar por tus riberas sin mojarme", así inicia Sylvia Japanese "espero a coro con un violín de única cuerda
haciéndome japonesa", dice luego, y mientras tanto despliega la magia de un bellísimo poema raro. Muy raro (por bueno).