transmisión
Fue en el borde exacto del abismo,
no en las orillas de un río manso.
Fue entre conversaciones olvidadas,
no en el sentido de las palabras.
Fueron signos navegando sus dominios,
los que me concedieron una naturaleza deseante.
Ame, la cárcel de ese ministerio.
Tanta libertad, encadenaba la vida de un ser solitario.
A veces, quedábamos a solas, tú y yo entre montañas,
amaneceres y océanos abiertos.
Siempre me enamorabas, me enamorabas, me enamorabas.
Inclinación natural a las transparencias.
Una mujer extraña, ángel o demonio,
a punto de ser castigada permanentemente.
No pacta con los hombres en contra de los hombres.
Le fue prohibido.
Difícil arte, transmitir las veladuras.
del libro “Blues para la Corona”
un verdadero infierno
Siempre
un
recuerdo
recuerda
a mis antepasados
muertos.
Después,
la
lluvia
lava
todos los ensueños.
Ya no busco a dios
entre las ruinas,
ahora
lo siento más alto,
el cielo
es
nuestro
Camarada de redes,
pescadores,
pescando
signos
inciertos.
Capitanes
que abandonaron
el
barco
para seguirnos.
Un verdadero infierno.
poema inédito
gracias Alicia, hoy te llamaré como el poema "camarada de redes. Un placer. Estamos en contacto, beso
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